La atopia

La atopia es la predisposición anormal a sintetizar los anticuerpos de tipo IGE debido a los alérgenos naturales que han entrado en el organismo, a través de la piel de la mucosa del tubo digestivo y de las vías respiratorias y oculares.

Se cree que fundamentalmente se deben a  multitud de cambios en los países desarrollados durante los últimos años, entre ellos la polución, la reducción en la frecuencia y duración de la lactancia, la reducción del consumo de ácidos grasos insaturados en beneficio de los saturados, el exceso de uso de antibióticos o el exceso de higiene personal y a otros factores que cambian la inmunidad desde las primeras etapas de vida.

La respuesta alérgica empieza ya en la vida dentro del útero. El desarrollo de la respuesta atópica está relacionado con un predominio de la población de linfocitos de tipo TH2, que están en el origen de la producción de IGE y de las citoquinas proinflamatorias. El origen es el feto que se encuentra en un entorno de tipo TH2 para impedir el rechazo del mismo por parte del organismo de la madre. Cuando nace el bebé su sistema linfocitario se caracteriza por unos linfocitos inmaduros, sin marcadores específicos.

En los primeros meses de vida eso linfocitos inmaduros adquieren unas propiedades funcionales, gracias al contacto con antígenos exteriores y los primeros antígenos que encuentra el bebé son los de la flora vaginal de la madre, en la cesárea no se va a producir este encuentro o si la madre tiene un terreno bacteriológico perturbado el bebe va a orientar sus defensas en una dirección anormal, es decir no adquiere la capacidad de una respuesta destinada a luchar contra las infecciones tipo TH1, ya que en ausencia de infecciones o de flora vaginal correcta en la madre sus defensas se orientan al tipo TH2 y por tanto hacia una inflamación alérgica. Esto unido al uso precoz y continuado de antibióticos ha sido relacionado con un riesgo agudo de asma y alergia.

Otras causas que cambian la inmunidad

También el uso generalizado de las vacunas impiden el desarrollo de la infección y por tanto la defensa del organismo por los TH1 promoviendo la proliferación de los TH2.

Asimismo el papel de la higiene excesiva: hay menos alergias en los niños que viven en el campo que en los de las ciudades, debido a la exposición precoz a las endotoxinas de los gérmenes gran negativos presentes en los animales de granja.

Para el terreno atópico tenemos pues claro la necesidad de tratar el terreno cuanto antes. Las alergias se pueden prevenir gracias a la nutrición: Probioticos, ácidos grasos esenciales, glutamina… que van a reforzar los mecanismos de defensa de la barrera digestiva y cuidando la alimentación.

Por tanto hay que revertir todo lo que podamos estos hábitos de forma que evitemos este tipo de alteración del sistema inmunitario. Esto podemos testarlo con un kit de inmunidad.

Angel Salazar

Kinepharma

Leave a comment

You must be logged in to post a comment.

  • Español
  • Francés
  • Italiano

Archives