Nov 20, 2018

Reparar la mucosa gástrica y vencer al Helicobacter Pylori sin antibióticos

mucosa gastrica, estómago

La acidez del estómago es beneficiosa al actuar como una defensa primaria contra las infecciones y como ayuda en las primeras fases de la digestión. El cuerpo protege sus propios tejidos delicados del ácido del estómago con sistemas que requieren un equilibrio preciso.

El mecanismo de defensa más importante lo forman las células parietales. Estas células tapizan el revestimiento del estómago, segregando una capa gruesa de mucosidad protectora. Sin embargo, si las defensas naturales del cuerpo contra los ácidos estomacales se rompen, puede provocar trastornos estomacales como la gastritis y la úlcera péptica.

La gastritis es la inflamación de las paredes que forman el revestimiento del estómago. No siempre produce síntomas, pero cuando surgen, pueden incluir dolor abdominal, náuseas, vómitos e indigestión. Si bien este proceso puede desencadenarse por una gran cantidad de factores, una de las causas más comunes es la infección con la bacteria H. pylori.

 Helicobacter Pylori es una causa importante de trastornos estomacales e intestinales, tales como úlceras estomacales y duodenales (el comienzo del intestino delgado), gastritis y cáncer de estómago.

Con el tiempo, H. pylori erosiona la barrera esencial de la mucosa, dejando el tejido del estómago y del intestino delgado debilitado y expuesto a los fuertes ácidos que se producen al comer y digerir. Una vez incrustada en el revestimiento mucoso, esta bacteria provoca  una afluencia de células inflamatorias del sistema inmune al secretar poderosos «factores de virulencia» (moléculas producidas por los patógenos).

Estas proteínas bacterianas bloquean la función normal de ciertas células inmunitarias, al tiempo que aumentan la producción de radicales libres,  y estimulan a otro grupo de las células inmunes para producir citoquinas inflamatorias (mensajeras encargadas de transmitir la señal a nuevas células inflamatorias para que acudan a esa zona. H. pylori puede tratarse eficazmente con antibióticos. Sin embargo, existe evidencia convincente de que la combinación única del mineral zinccon el péptido carnosina derivado de aminoácidos, proporciona acciones efectivas contra H. pylori y restaura de forma segura la salud del estómago.

La suplementación con zinc ha demostrado durante mucho tiempo que proporciona efectos gastroprotectores y el nutriente carnosina puede aumentar aún más estos efectos. Un suplemento de Zinc-carnosina  nos permite un enfoque integral para abordar problemas estomacales como la gastritis y las úlceras pépticas.

Para empezar, elimina la fuente del problema al acelerar la erradicación de H. pylori. También se ha demostrado que neutraliza los radicales libres y reduce la inflamación. Además de aumentar la producción de un factor de crecimiento, importante para la reparación de la herida gástrica, la unión de zinc-carnosina también repara el revestimiento mucoso dañado al estimular la secreción de nueva mucosa gástrica.

Gastritis

Los estudios en humanos han podido demostrar dicha efectividad al comprobar cómo se logran reducir los síntomas asociados con las úlceras, al tiempo que se produce la mejora o curación del área dañada. Para la realización del estudio, los científicos administraron 150 mg de zinc-carnosina por día a 25 pacientes con diagnóstico de úlceras gástricas.

Después de ocho semanas, los resultados reportaron un;

  • 6% de reducción en la acidez estomacal,
  • 80% de reducción en eructos,
  • 7% de reducción en náuseas,
  • 9% de reducción en distensión abdominal, y
  • Reducción del 71% en la sensibilidad del estómago.

Los investigadores también pudieron confirmar:

  • La desaparición completa del dolor nocturno en el 91%de los participantes, y
  • La curación en el 65% de los sujetos durante la evaluación endoscópica.

Pero esta no es toda la evidencia científica que nos puede ayudar en el tratamiento contra el H. Pylori.  Los científicos llevaron a cabo otra investigación de alrededor 700 cepas de especies de Lactobacillus, durante la cual,  identificaron una cepa con la capacidad de unirse a los organismos de H. pylori y sacarlos inofensivamente del tracto gastrointestinal; Lactobacillus Reuteri.

Con la ayuda de esta cepa, se consigue reducir sustancialmente el número de bacterias H. pylori que residen en el estómago, sin necesidad de abordar un tratamiento con antibióticos.

Si quieres ayudarte de la kinesiología para diagnosticar una infección por H. Pylori puedes utilizar el kit de testaje de bacterias,  y para valorar el estado de nuestro sistema digestivo, incluyendo, mucosas, estómago, duodeno, intestino delgado e grueso, puedes ayudarte del kit de testaje de órganos.

 

Leave a comment

You must be logged in to post a comment.

  • Español
  • Francés
  • Italiano
  • Portugués, Portugal

Archives